Se presenta el libro sobre Nikolas Segurola, padre de la escuela de pastores
Dic012016
Nikolas Segurola ha pasado la vida cultivando tres campos. El pastoreo ha sido su pasión, en Aranzazu encontró la vocación y también se ha manejado entre bertsos. De esas tres, la primera es la que le ha dado la fama.
Ha sido protagonista en la mejora genética de la oveja latxa, en el nacimiento de la D.O. Idiazabal, en el diseño y desarrollo de las queserías y las salas de ordeño y en la concepción y evolución de la escuela de pastores. Es por ésta última por la que es especialmente estimado. La escuela de pastores de Gomiztegi debe al trabajo de Segurola la fama internacional de la que goza. Aunque como le gusta recordar a él, “antes era pastor el más tonto de la casa y se le valoraba muy poco. Se ha conseguido dar prestigio al oficio, pero eso no ha sido el trabajo de unos pocos, sino el fruto de la cooperación entre pastores, técnicos y políticos”.
Su vida en un libro
Con 11 años llegó a Aranzazu. Al despedirse de las ovejas que dejaba en casa, rompió a llorar. Cinco años más tarde, enfermó y tuvo que volver a casa. Pero con 19 años regresó a Aranzazu. Entonces emprendió el camino que le daría la fama.
Ahora tiene 77 años y acaban de presentar el libro que recoge toda su vida: “Nikolas Segurola, Fraide, artzain eta bertsolari”, coordinado por el bertsolari y presentador Xabier Euskitze y escrito por éste junto a Iñaki Beristain y Eduardo Urarte.
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